Dani Osorio, productor de frutillas en Ciudad del Plata, está sufriendo las consecuencias de un derrame químico ocurrido en 2013. Su caso volvió a la agenda pública tras una audiencia judicial esta semana, donde no logró llegar a un acuerdo con la empresa Toryal, responsable del derrame de percloroetileno, una sustancia tóxica que contaminó el pozo de agua de su predio.
La situación afecta tanto a su producción como a su salud. Este jueves en Informativo 41, Osorio contó que en las últimas semanas le detectaron una enfermedad en el esófago, que podría estar relacionada con el consumo de agua contaminada. También denunció una fuerte caída en las ventas y deudas crecientes, debido a los altos costos para seguir produciendo en estas condiciones.
Pese a que en septiembre del año pasado su caso fue tratado en la Junta Departamental, Osorio asegura que no ha habido avances reales. La empresa instaló un tanque de agua en su predio, pero desde entonces no volvió a comunicarse. La posibilidad de una reubicación o de instalar una planta potabilizadora está sobre la mesa, pero no hay definiciones. “Invertí mucho en este predio. Irme sin respaldo sería arrancar de cero”, dijo.
El productor también cuestionó al Ministerio de Ambiente, a quien responsabiliza por la falta de controles y por no advertirle de la contaminación cuando hizo el pozo en 2021. “No responden llamadas ni correos, los análisis los estamos pagando nosotros”, señaló. En marzo logró conectarse a OSE, pero solo tras realizar personalmente los trámites.
Osorio espera que en la próxima audiencia, prevista para el 25 de junio, la empresa Toryal proponga una solución seria. Mientras tanto, pide controles más estrictos y respuestas reales: “Nadie me dijo lo que estaba pasando, sabiendo que yo iba a producir para vivir. No se puede seguir así”.