Jueves, 01 Mayo 2025 17:15

La lucha feminista también estuvo presente en el acto del 1º de mayo en San José

Durante la movilización, se reclamó por igualdad de derechos, el fin de la violencia de género y el reconocimiento del feminismo como parte de la justicia social.

En el acto por el Día de los Trabajadores en San José, la agenda feminista tuvo un espacio importante. La oratoria estuvo a cargo de Nahir Bell, quien reivindicó la lucha por la igualdad de género, denunció la persistencia de diversas formas de violencia hacia mujeres y disidencias, y exigió respuestas institucionales a problemas estructurales.

Bell expresó que, a pesar de los años de reclamos, la situación no ha mejorado de forma sustancial. Señaló que continúan las brechas salariales, la baja participación de mujeres en cargos de decisión y la discriminación interseccional que afecta especialmente a mujeres afrodescendientes y con discapacidad.

Además, la oradora hizo referencia a datos recientes divulgados por el INAU que indican que el 70% de las denuncias de violencia involucran a niñas, niños y adolescentes, lo que representa un aumento del 9% con respecto al año anterior. Advirtió también sobre los casos de violencia extrema y la llamada violencia vicaria, al tiempo que cuestionó la respuesta del sistema judicial y de protección.

Durante el discurso también se mencionó el caso del exsenador Gustavo Penadés, quien fue condenado por delitos de abuso sexual contra menores de edad, como un símbolo de impunidad y abuso de poder.

A nivel regional, Bell expresó preocupación por el avance de discursos de odio, haciendo mención al gobierno argentino de Javier Milei y a situaciones de violencia contra personas LGBTIQ+ en distintos países de la región. “El odio no es libertad, el transodio mata”, afirmó.

La intervención incluyó una demanda por una atención integral en salud mental, con referencia al caso de Milagros Chamorro, una joven de Maldonado que se quitó la vida tras varios años de sufrir las deficiencias de los mecanismos de protección a las víctimas de abuso sexual que proporciona el Estado uruguayo. En ese marco, se cuestionó la capacidad del Estado para brindar protección efectiva.

El discurso cerró con un llamado a construir una justicia social con perspectiva de género, reconociendo la memoria de víctimas del terrorismo de Estado, y exigiendo condiciones laborales dignas, igualdad y reparación. “No hay justicia social sin feminismo popular”, expresó Bell, subrayando la necesidad de una lucha colectiva con enfoque interseccional.